Ciclo de Milankovitch


Según Milankovitch, las variaciones orbitales son las causantes de los períodos glaciales e interglaciares producidos durante esta última época. Él argumenta que la radiación solar tiene alteraciones pero no son suficientes como para cambiar el clima del planeta, lo que sí pueden serlo son los cambios en la órbita terrestre.
La teoría de Milankovitch se basa en que la Tierra gira alrededor del Sol influida por tres parámetros básicos que modifican los movimientos de traslación y rotación del planeta.

1. Excentricidad de la órbita, basada en lo estirada que está de la elipse. Si la órbita de la Tierra es más elíptica la excentricidad es mayor y al contrario si es más circular.
La excentricidad varía entre sus valores extremos cada 100.000 años, y esta variación puede suponer entre un 1% y un 11% de diferencia en la cantidad de radiación solar que recibe la Tierra entre el afelio (punto más alejado de la Tierra respecto del Sol) y el perihelio (punto más cercano).
En la actualidad, entre el afelio y el perihelio la cantidad de radiación que llega a la Tierra cambia un 6%. En el momento que se alcanza la excentricidad máximas, se puede observar como se intensifican las estaciones en un hemisferio y se moderan en el otro.

2. Oblicuidad: cambios en el ángulo del eje de rotación de la tierra (más o menos inclinación), estando en órbita alrededor del Sol. La inclinación oscila entre 21,6º y 24.5º cada 40.000 años.
Actualmente está en 23,5º. Este fenómeno es el responsable de las estaciones. Aunque no cambia la cantidad de radiación que recibe la Tierra, sí varía su distribución sobre la superficie. Al aumentar el ángulo, las estaciones resultan más extremas en ambos hemisferios (es decir veranos más cálidos e inviernos más fríos)

3. Precesión: giro del eje de rotación (el eje de la Tierra oscila como una peonza), en sentido contrario a la rotación, cada 26.000 años. Se debe al achatamiento de la esfera terrestre. Su efecto sobre el clima es consecuencia de la modificación de la posición relativa de los solsticios y los equinoccios respecto al afelio y al perihelio.
En la actualidad el solsticio de verano coincide con el afelio en el hemisferio norte. Dentro de 6000 años el afelio coincidirá con el equinoccio de primavera, y dentro de unos 12000 años el solsticio de verano coincidirá con el perihelio.
Estos ciclos son los responsables de explicar la sucesión de períodos glaciares e interglaciares que se produjeron durante el cuaternario (y probablemente en otras eras).